El Tribunal Superior de Justicia de Madrid estima el recurso interpuesto por la actora y considera que no hay fraude de ley en el comportamiento de la trabajadora autónoma para lucrar la prestación de maternidad y entiende que no ha existido simulación de alta en el RETA que le permitiera acceder a las prestaciones por falta de actividad profesional. Considera, además el tribunal que la falta de facturación del último año está justificada por encontrarse en Inglaterra acompañando a su marido y por el propio hecho de la maternidad. Por último, sostiene que “La interpretación de la sentencia de instancia no es complaciente, a nuestro modo de ver, al examinar las circunstancias del caso y los derechos e intereses en juego, con la dimensión constitucional de la conciliación de la vida laboral y familiar y la perspectiva de género, y de alguna manera penaliza el hecho de la maternidad”.