La sentencia mantiene la privación de la patria potestad del padre, estimada por la audiencia que el juzgado desestimó. Vitorino nació en 2005, la relación entre sus padres se rompió a los 16 meses de edad. En 2009 se fijó una pensión alimenticia que el padre no abonó; se le condenó por abandono de familia. Desde 2009 el padre ni se comunica ni se preocupa por el hijo, haciéndose cargo en exclusiva, la madre. Entre junio de 2007 y mayo de 2012 no contribuyó en absoluto a la alimentación; a partir de mayo de 2012 hasta diciembre de 2012 lo hizo de manera irregular, no pagó todo lo que le correspondía y no todos los meses. La madre solicitó la privación de la patria potestad. La sentencia del TS mantiene la privación de la patria potestad, sobre la base del interés superior del menor dada la desatención personal y económica hacia el hijo. En especial entiende que una falta de comunicación tan prolongada, revela per se un gravísimo incumplimiento de las obligaciones por parte del padre en relación con su hijo menor de edad, que basta para justificarla.